Seguim caminant i aprenent. Mayores 2º trimestre

RIBARROJA DEL TÚRIA .- Tan prop i tan desconeguda. Abril,  21

Visitamos esta villa /castillo de nuestro rio. Puerta y vado desde tiempos ibéricos; de la romanización y pasado visigodo vemos buenas muestras en el recuperado palacio, museo municipal. También del agua, sus derechos y aprovechamiento  en la cisterna y  molino. Historia, Arte, antropología y etnografía, en su bien tratado patrimonio. Además  juego y pasión acuosos, por las celebraciones y ofrendas al rio; así  mismo  presente cara al  futuro por la adecuación de sus riberas en  parque fluvial.

Todo ello lo  pudimos gozar bien guiados y asistidos, completando el día con una extraordinaria comida en el restaurant de Masía de Traver, de modo que las sorpresas gastronómicas van siendo costumbre, en las salidas del grupo.

Utiel, sumando en sus particularidades-. Mayo 12

Sin almorzar debimos salir a las 8,30, pero un error nos retrasó. Menos mal que nos esperaba un almuerzo de brasa al punto, matanza y vino de la tierra. Y seguimos en Las  Bodegas Pedro Moreno, como fortaleza de  caldos durmientes. Historia y futuro, aprender y paladear.

No tuvimos tiempo de ver el Museo ni el Casco antiguo utielano que teníamos proyectado, para no llegar tarde a la comida que los del Tollo nos habían anunciado a las 2,30. Desfile de manjares típicos, morteruelo, ajo arriero, morro, ensaladas del tiempo con sus encurtidos y chuletas a la brasa  con patatas fritas, tal cual las de nuestra madre.

Bien avituallados subimos al paraje de El Remedio   enclave de vista privilegiada  y continente mariano de primer orden. La devoción generosa, desborda en arte y tradición. Un simple ermitaño resultó el mejor guía, simpático y servicial, para particularizar sobre lo conocido y admirar lo inesperado. Como suelen ser nuestras excursiones,, en las que la camaradería y oficio se nos  nota y  asegura las mejores bienvenidas.

Camins del grial, 2 de junio.

No quisimos perder la oportunidad de contemplar la magnífica exposición que el Ayuntamiento y la Archidiócesis valentina presentaron en El Almudín, antes de que por  la fiesta del Corpus se clausurara. Siempre en martes concertamos  visita guidada que nos documentó, al tiempo que el arte, siempre al servicio de la explicación del Misterio nos ilustrara. Así supimos por qué Valencia, cabeza en su día de la Corona de Aragón, siendo esta de un imperio,  albergó, como prenda real y garantía de préstamos del Cabildo Catedralicio  a Alfonso El Magnánimo: su relicario, en el que la joya más preciada és el Cáliz de la Última Cena. Cómo llegó y al margen de leyendas.

Una vez más, necesitamos motivo para saber de nuestra historia, comprender que nada fue, és, ni será sin motivo. Valencia fue grande y a las pruebas me remito, pero cuando  ignoramos nuestro pasado y no trabajamos por la cultura presente, permitimos que otros marquen nuestro futuro.  Además pasarlo bien está a nuestro alcanzo, vale la pena